Cuando nos vemos en la situación de tener que contactar con una empresa dedicada a las rehabilitaciones de edificios debido a problemas estructurales, fisuras, filtración de humedades etc o, aunque no haya ninguna avería importante, queramos llevar a cabo un trabajo de aislamiento acústico y térmico con el objetivo de conseguir un edificio más sostenible y una mejora estética del inmueble, en lo primero que pensamos es en lo que nos va a costar.
La buena noticia, en este caso, es que una gran mayoría de empresas de reformas ofrecen a sus clientes una financiación del 100 % y con muy buenas condiciones. Además, también tenemos la posibilidad de informarnos en los organismos pertinentes de nuestra comunidad autónoma, sobre las ayudas y subvenciones que ofrecen para la rehabilitación de edificios.
Cada vez estamos más concienciados sobre el medioambiente y los resultados positivos que se obtienen gracias a los trabajos encaminados a su mejora. Influyen en una atmósfera más limpia y libre de elementos nocivos, la calidad de vida de todos y el ahorro económico. Por ello, cada vez más, se apoya la iniciativa de los propietarios de inmuebles de apostar por un edificio más sostenible y es cuando surgen las ayudas económicas para que les sea más fácil llevarlo a cabo.
Las rehabilitaciones de edificios por fallo de filtración de humedades en las cubiertas, evita, si se hace a tiempo, la aparición de moho, no hace falta añadir lo dañino que es para la salud de sus inquilinos. El problema es todavía mayor si en el inmueble hay niños y personas mayores.
Las rehabilitaciones en las fachadas por fisuras y/o grietas, cuando aún no son demasiado grandes y profundas, reduce el riesgo de que el problema se agrave y produzca fallos en la estructura, lo cual podría poner en peligro la vida de sus propietarios e inquilinos.
Es un tema serio y como tal hay que tratarlo. Si el edificio en el que vivimos presenta algún fallo, por pequeño que sea, hemos de ponernos en acción y contratar los servicios de una empresa de rehabilitación de inmuebles para que no ocurra ningún hecho del que tengamos que arrepentirnos en un futuro próximo. Como reza el dicho: Más vale prevenir que lamentar.
Dicho esto y habida cuenta de que es nuestra responsabilidad como propietarios, mantener y mejorar el estado del edificio, el primer paso que debemos dar es contactar con empresas de reformas y pedir varios presupuestos.