Tiziano Vecellio, un pintor italiano del Renacimiento, máximo exponente de la escuela veneciana no se podría imaginar que en pleno siglo XXI, uno de sus cuadros también sería testigo de la tokenización una nueva forma de financiación que está revolucionando toda la economía. Hoy los nuevos mecenas están en la Red y gracias a Blockchain pueden enviar valor en cuestión de segundos sin la intermediación de las instituciones bancarias tradicionales.
La obra se titula “Entierro de Cristo”, y es un óleo sobre lienzo de 100x115cm. Esta obra perteneció originalmente a la colección del Príncipe Borghese y más tarde, a Sir Charles Robinson, conservador de museos y amante coleccionista de cuadros. En 1914, un año más tarde de la muerte de Sir Robinson, el lienzo fue subastado en Berlín por Lepke, un conocido gangster americano de origen judío. Posteriormente, encontramos la obra en la Colección de Nemes Marczell, un conocido marchante de arte húngaro, en la ciudad de París.
Datado antes de 1559, representa el entierro de Cristo. El cuerpo de Cristo está colocado en la tumba por un discípulo y José de Arimatea. A la izquierda, María y Juan y a la derecha, María Magdalena con las manos hacia el frente. Hay una réplica de este cuadro en Viena. Ambas se atribuyen a Tiziano y tienen conexión con dos pinturas que se encuentran en el Museo del Prado.
Valorado en aproximadamente 40.000.000 de euros, la pintura está en manos de un coleccionista privado. Look Lateral, una comunidad de entusiastas del arte y la tecnología, y Token Develop, consultora especializada en tokenización de activos, van a ser pioneros en: conseguir liquidez mediante la venta total o parcial del cuadro a través de la emisión de fichas digitales o tokens que representan la propiedad de una parte de la obra.
Su filosofía es transformar el mercado del arte actual para aumentar su liquidez y fomentar el acceso universal a todo el mundo.
¿En qué consiste la tokenización?
El inversor medio no posee mucho arte. La razón de esa falta de inversión es clara: no invierte en obras porque las barreras de entrada son demasiado altas.
La gran mayoría de personas no tiene dinero para invertir en cuadros de arte, ubicados en conocidas galerías o vendidas en subastas. Así, como tampoco tiene tiempo ni el conocimiento para detectar artistas potenciales o evaluar qué obras comprar. Pero la tokenización del arte puede cambiar todo esto. De hecho. ya es posible convertir, un cuadro de Tiziano en un token, un valor accesible y comerciable en cualquier parte del mundo a través de los mercados secundarios de activos.
Mediante el uso de moneda fiat, como euros o dólares e incluso, criptomonedas, es posible comprar tokens, es decir, un trozo de un activo (desde un inmueble hasta una obra de arte). Una vez se posea uno o más tokens, se puede mantener esa inversión, venderla o intercambiarla según las fluctuaciones del mercado.
Si la pintura incrementa de valor en su totalidad, los titulares de los tokens recibirán la parte proporcional. Y como el arte se suele revalorizar, es una buena inversión. Pinturas tan conocidas como un Tiziano suelen apreciarse un 30% anual. Por lo que, es normal que haya personas interesadas en esta clase de activo que ofrece una alta rentabilidad.
Los nuevos mecenas del arte
La tokenización permite la inversión en arte. Sin embargo, los inversores no son los únicos que se benefician de este sistema. Los museos y otras instituciones pueden recaudar dinero sin tener que pedir préstamos a los bancos. Además, permite vender tokens de una de las obras que ya poseen. Y con el dinero recaudado, se puede ampliar más alguna colección sin depender de prestamistas.
Además, los artistas pueden utilizar las inversiones para financiar su propio trabajo, vender tokens de obras de arte y aumentar su valor mediante el comercio. Nada de esto sucederá de la noche a la mañana pero empresas como Token Develop, permite a las personas adquirir tokens de obras de arte. De esta forma, podrá “tener” ese cuadro de Tiziano con el que siempre ha soñado.