Los suplementos alimenticios o también llamados nutracéuticos, complementan la ingesta nutricional y metabólica de alimentos como vitaminas, minerales y fitonutrientes.
Con el transcurso de los años, los suplementos alimenticios han conquistado los supermercados, el comercio electrónico y las parafarmacias, convirtiéndose en un producto fácil de consumir, pero también despertando dudas sobre su origen y calidad, si bien son de venta libre, en la mayoría de los casos, pero lo mejor es consultar siempre con su médico.
Los suplementos alimenticios en muchos casos mejoran la salud y previenen las deficiencias nutricionales, por lo que la ingesta de suplementos alimenticios tiene una finalidad terapéutica.
En muchos casos, las deficiencias pueden ser menores, pero se vuelven crónicas con el tiempo debido a los efectos del envejecimiento. Nuestro cuerpo reduce el potencial de síntesis y absorción de nutrientes con un efecto invisible a simple vista, pero medible en la salud de órganos y tejidos.
Entonces, ¿cómo elegir suplementos alimenticios? ¿Qué criterios debemos tener en cuenta antes de comprarlos?
Efectividad
Si te dicen "toma magnesio", ¿a qué se refieren? ¿Con cloruro de magnesio? ¿Con citrato de magnesio? ¿O sulfato? Prefiere siempre la fórmula más funcional, obteniendo información de fuentes confiables.
¿Y el zinc? ¿Y la vitamina D ? ¿Y esa K? ¿Y puede distinguir entre las diferentes formas de vitamina B? Debes estar informado antes de comprar.
Antes de elegir la marca, infórmate sobre la seriedad de las investigaciones realizadas, los estudios, los ensayos clínicos. Habitualmente se le dice que los suplementos no funcionan, pero eso no es cierto en absoluto. De hecho, se utiliza más de un suplemento en el tratamiento incluso de enfermedades graves. El punto es comprender lo que está buscando y lo que puede esperar. Entonces, un poco más de información nunca está de más.
Dosis adecuadas
Adecuado no significa "mucho", sino que lo debido. Comienza por el concepto de necesidades diarias. Las dosis máximas deben ser recetadas por el médico, las dosis más bajas no causan problemas, pero siguen siendo efectivas cuando se usan a tiempo.
Verificar los otros ingredientes
Los suplementos alimenticios se venden en forma de tabletas, cápsulas, gotas, polvos y tinturas. En el caso de tabletas y cápsulas, prestar mucha atención a la calidad de los ingredientes. Asegúrate de que no se utilicen azúcares, colorantes y otros aditivos absolutamente inútiles o incluso contraproducentes.
Ser clínicamente probados y aprobados
Los suplementos alimenticios deben contener ingredientes activos conocidos y probados y sobre los que existan estudios clínicos positivos. Además, en cada país los suplementos deben notificarse a las autoridades competentes (Ministerio de Salud).
No improvisar en la elección
Elegir las marcas más confiables si puede, o en cualquier caso basándose en una reputación valiosa y comercializable en la que pueda confiar. Corroborar la reputación online, verificar dónde se encuentran, el sitio web. Si se trata de empresas serias, encontrarás las respuestas correctas.
Comprobare el origen del producto
China es el primer país fabricante del mundo y, por lo tanto, es absolutamente injusto llamar de mala calidad a todo lo que se fabrica allí, porque es absolutamente falso.
Pero en Suiza y en la Unión Europea hay productores confiables, que tienen un control total sobre la cadena de producción y distribución y sobre quienes existe una supervisión seria y cercana. Swiss Made, por ejemplo, es una marca de calidad reconocida en todas partes.
Consultar la fecha de vencimiento
Tomar suplementos a largo plazo, con la esperanza de consumirlos durante un período de meses, no garantiza su integridad.
No mezclar vitaminas al azar
Utilizar sólo los suplementos necesarios para determinados fines. Por ejemplo: entrenamiento físico, un régimen de dieta particular. Los multivitamínicos están bastante de moda, pero no confíes en el producto del supermercado. Piensa el propósito por el cual toma suplementos, investiga en sitios de renombre, pregunta al farmacéutico y solo entonces compre.
No elegir en función del precio más barato
La tentación de gastar menos y conseguir suministros es muy fuerte. Después de todo, eso es lo que hacemos en el supermercado, pero con los nutracéuticos tenemos que tener cuidado. Pagas por la calidad. Si el precio es demasiado bajo, significa que está comprando nutrientes de menor valor, además, el método de producción y conservación está claramente orientado al ahorro.
Son muchos los beneficios de los suplementos alimenticios, solo debes saber elegirlos y consumirlos correctamente.
