Una de las decisiones más difíciles a la cual debemos enfrentarnos es enviar a nuestros seres queridos a una residencia para mayores. Es muchos casos se deba a que la persona en cuestión no puede valerse por sí misma y nos resulta complejo ayudarla, y es mejor que profesionales en la materia se encarguen de ello.
Sea cual sea la razón, para nadie es un secreto que la tercera edad viene con un sinfín de exigencias que en determinados lugares puede solventar de mejor forma. Por lo tanto, si necesitas enviar a tus adultos mayores a una residencia, debes tener en cuenta ciertas cuestiones para asegurarte que su estadía sea segura, divertida y nada traumática.
En el siguiente texto te damos algunos consejos para que elijas la opción indicada.
Atención y servicios
Una de las cuestiones más importantes antes de inscribir a tu ser querido en una residencia es saber si cuenta con alguna clase de problema puntual. En este sentido, te será de mucha utilidad pues podrás exigir que el lugar ofrezca todas las garantías para un buen cuidado individual.
Algunas personas sufren cambios en el comportamiento con la edad o no pueden moverse con soltura, por lo cual unos buenos servicios y la atención correcta hará que la estadía en dichos lugares sea todo lo buena que merece.
Personal calificado
Muchas veces las personas no pueden cuidar a sus adultos mayores no porque no quieras sino porque se ven impedidos a la hora de darle todo lo que necesita. Por esa razón, la residencia que elijas deberá contar con profesionales en estas cuestiones, personal altamente calificado en todo lo referente al cuidado en adultos mayores.
Fíjate y exigen que la residencia verifique los antecedentes del personal, esto para evitar que personas con malos historiales cuiden a tu familiar. Otro consejo es darnos cuenta cómo los otros residentes interactúan con el personal. Además, exige reunirte con los especialistas encargados de cada área para que le expliquen el funcionamiento del lugar.
En definitiva, corrobore todo lo referente al personal y lo que pueden ofrecerle a tu familiar. Después de todo su seguridad y comodidad depende de ti. Todo esto lo explican muy bien en este artículo de SegoviaAlDía.
Limpieza y seguridad
Uno de los puntos fundamentales que debe tener una residencia para la tercera edad. Ten muy en cuenta que sea segura y limpia, especialmente el espacio de los baños. Por eso es recomendable que visites es lugar y no te fíes solamente de fotos u opiniones de terceros. Una vez estés allí, fíjate que no haya ninguna clase de olores desagradables como a basura, orina o moho.
Si has ido en diferentes ocasiones y estos olores persistes, de seguro la limpieza del lugar no es muy buena. Todos los baños deben tener pasamanos y suelos antideslizantes, además los muebles deben ser resistentes y las puertas exteriores ser seguras.
Comodidad
Cuando inspecciones el lugar es recomendable que pases un rato observando la vida cotidiana. Para ello también puedes preguntar a los residentes y visitantes sobre lo que opinan del lugar y sus instalaciones. Fíjate si los residentes están limpios, vestidos de la manera adecuada y bien arreglados.
En muchos de estos lugares ofrecen un “horario de vida” del residente con el cual te puedes dar cuenta cómo será la vida cotidiana de la persona inscrita. Por otro lado, ten en cuenta la tranquilidad, la buena iluminación y lo agradable que se sienta estar allí.
Política de visitas
Algo esencias es que te asegures que la residencia te ofrezca un buen horario de visitas y, además, de que se encuentre en un lugar cercano para que cualquier persona pueda ir. Deberás comprobar los horarios con los residentes y sus familiares, no tengas pena de preguntar pues de ello dependerá la seguridad, comodidad y la salud psicológica de tu familiar.