Viento de cambio en Cuba
De la isla de Cuba es común escuchar historias de personas que han decidido salir de país, para nunca más volver. Este fenómeno a causado algo interesante: junto con la salida de la isla se genera una deserción de jugadores a Norteamérica, y esto ha destacado el talento que se está desarrollando en Cuba.
El fútbol no ocupa exactamente un lugar importante en Cuba. Al menos no en lo que respecta al gobierno y su política de mantener clausurado del país.
El béisbol y el boxeo son tradicionalmente los deportes de elección en la nación más poblada del Caribe, el país comunista gobernado por la familia Castro desde una revolución en 1959. Sin embargo el entrenamiento de futbol parece no recibir relevancia alguna en la isla.
Pero las cosas podrían estar cambiando a medida que el fútbol se vuelve más popular para los cubanos, especialmente entre los jóvenes.
Y aunado a esto ha habido una reciente ola de defecciones de algunos de los mejores jugadores de la selección de los Estados Unidos. Para estos jugadores las condiciones futbolísticas son mucho mejores, mientras que el suelo de Estados Unidos y Canadá ha proporcionado una ventana a la afluencia de talento latente que podría estar escondido detrás de la cortina de la guerra fría del país.
Tomemos como ejemplo a un hombre de apellido Lara, que se ha convertido en el agente de facto de los jugadores cubanos en su deserción clandestina después de su llegada a los Estados Unidos. En el técnico de Rayos X, club con sede en Miami, que los conduce a través de la burocracia estadounidense y eventuales juicios, con la mayoría de los clubes estadounidenses de división baja.
Esto es algo de lo que se puede lograr con la iniciativa adecuada. Estos jugadores deberán mejorar su técnica de juego en alguna de las escuelas de futbol, para ser competitivos.