Las cubiertas para piscinas son elementos muy prácticos que ayudan a conservar el agua en buenas condiciones, y también operan como mecanismo de seguridad a la hora de evitar accidentes, como vamos a ver a continuación.
¿Qué son las cubiertas para piscina?
Tal y como explicaban recientemente en un artículo de SalamancaRTValdia, existen varios tipos de cubiertas para piscinas. Lo que todas las tipologías tienen en común es que se encargan de proteger la superficie, reduciendo con ello la necesidad de mantenimiento del agua.
Asociamos las cubiertas para piscina con un elemento típico del invierno, pero lo cierto es que también hay algunos modelos pensados específicamente para el verano. Estos últimos se pueden quitar y poner fácilmente, lo que evita que el agua pueda ensuciarse o que se llene de insectos entre baño y baño.
Los modelos de verano están diseñados de tal manera que los rayos solares los traspasan, lo que permite que el agua se caliente a pesar de que la superficie de la piscina esté totalmente tapada. De hecho, el uso de la cubierta en combinación con el calor exterior, puede hacer que la temperatura del agua se incremente varios grados en comparación con la temperatura que tendría si no se usara cubierta.
Junto a las cubiertas están los cerramientos, que ofrecen una protección todavía mayor y permiten que la piscina se pueda utilizar durante todo el año si se combinan estas estructuras con un sistema de calentamiento del agua.
Funciones de las cubiertas para piscinas
Mantienen el agua limpia
El agua de la piscina suele ensuciarse bastante incluso aunque no se esté utilizando. Al estar ubicada en el jardín, es normal que caigan al agua restos de tierra, hojas, polvo, pelos de mascota…
Además, el agua de las piscinas tiene un importante atractivo para los insectos, y no es extraño ver avispas rondando por el borde. Más de una aparece después flotando en la superficie.
La cubierta para piscinas protege el agua tanto de los insectos como de todo tipo de suciedad, haciendo que la misma se mantenga limpia mucho más tiempo, tanto en la superficie como en el fondo.
Reducen la necesidad de mantenimiento del agua
Precisamente porque la misión principal de la cubierta es que no le caiga suciedad al agua, cuando usamos un elemento de este tipo de reduce mucho la necesidad de mantenimiento.
Habrá que seguir aplicando cloro (o sal si es una piscina salina), pero no será necesario tener la depuradora encendida durante muchas horas, porque no existirá tanta necesidad de filtrar el agua. Por otro lado, también el fondo estará más limpio, reduciendo con ello el uso del limpiafondos.
De esta forma, habrá más tiempo para disfrutar al máximo de la piscina durante el verano, sin tener que invertir horas y horas para conseguir que el agua esté en óptimas condiciones.
Reducen el nivel de evaporación del agua
Todos los que tienen piscina saben que hay que rellenarla varias veces a lo largo del verano. Es cierto que cuando hay niños en casa es más habitual que el agua acabe fuera de la piscina por sus juegos y saltos, pero incluso cuando solo se bañan adultos, es habitual notar que el volumen de agua va descendiendo con el paso del tiempo.
Es un fenómeno totalmente normal que se produce debido a la evaporación. El calor incide sobre el agua y hace que esta se vaya evaporando poco a poco. Por el contrario, si colocamos la cubierta durante las horas de más calor del día, el resultado es que el nivel de evaporación es notablemente menor.
Mejoran la seguridad
El riesgo de que los niños o las mascotas acaben en el agua cuando no están siendo supervisados siempre está ahí, y las cubiertas aportan un extra de seguridad en estos casos.
Cuando la cubierta está puesta el riesgo de que se produzca un accidente y un niño o un animal caigan al agua es mucho menor. No obstante, no está de más extremar las precauciones e instalar también algún tipo de barrera que impida el acceso a la zona de la piscina.
Las cubiertas para piscinas sirven para mucho más que para proteger el agua de la suciedad. Reducen el tiempo necesario para el mantenimiento, reducen el nivel de evaporación y, además, aumentan la seguridad. Con estos elementos todo son ventajas.
