Desde que tenemos uso de razón, se nos inculca el corazón como símbolo del amor, este ha sido plasmado infinidades de veces en tarjetas, globos, naipes, tapices, pinturas, en la comida y hasta en la ropa interior, pero ¿Por qué es el corazón el símbolo del amor? Y no en su lugar el cerebro o cualquier otro órgano.
El corazón no solo ha simbolizado el amor a través de los años, el mismo se encuentra relacionado con la inmortalidad, vitalidad y la valentía, por lo cual, existen diferentes teorías acerca de su origen.
Historia
Los primeros en representar gráficamente el corazón, se cree fueron los egipcios y su imagen dista mucho de la actual; los egipcios reconocían la importancia del corazón como órgano y además existía la creencia que era en el donde residían el alma y la mente de un hombre. De hecho, estos afirmaban que al morir, el corazón era apreciado durante el juicio final en una balanza, en la que del otro lado se encontraba la pluma de la verdad de la diosa Maat. El corazón pesaría lo mismo que la pluma de la verdad, en caso, de que la persona hubiese tenido buenos sentimientos y llevado una vida virtuosa, esto le permitiría disfrutar de la vida eterna.
Uno de los factores que probablemente impulso la imagen del corazón como símbolo del amor, proviene de culturas, como la india, china y japonesa, donde impera la creencia de que en el cuerpo existen chakras, en el cual casualmente, aquel que se encuentra a nivel del corazón, simboliza el amor y la compasión.
No obstante, no fue hasta mediados del siglo XIII, que la forma del corazón comenzó a ser asociada con el amor, a pesar de que la misma, puede ser encontrada representado en diversas obras antes de esta época, más sin embargo, estas personificaban en realidad hojas de hiedra, nenúfares.
La primera obra en la que se representó gráficamente el corazón como símbolo del amor fue a mediados del siglo XIII, en una ilustración de la novela francesa “Roman de la Poire” (Romance de la pera). En esta obra, se aprecia a uno de los personajes arrodillarse delante de una damisela, ofreciéndole su corazón como símbolo de su amor.
De ahí en adelante, fueron muchas las veces que el corazón fue representado como símbolo del amor, no obstante, este era dibujado con el pico hacia arriba hasta finales del siglo XIV y fue a partir del siglo XV que fue empezado a dibujar con el pico hacia abajo y más picudo, esto lo podíamos apreciar principalmente en las miniaturas del “Documenti d’amore” de Barberino.
Lo que realmente impulso la imagen del corazón fue la tradición del Medievo del amor atento, y se hizo más popular aun cuando se comenzó a utilizar en el intercambio de tarjetas de San Valentín en la Inglaterra del siglo XVII.
Sin importar su origen o el porqué del mismo, lo cierto es que el corazón seguirá siendo el símbolo del amor.