La secretaria de Seguridad Nacional hizo una ronda el martes en Capitol Hill mientras continúa presionando las prioridades de la agencia en las conversaciones de inmigración, pero se enfrenta al escepticismo de los senadores sobre la confiabilidad de la administración sobre el tema.
Las conversaciones en The Hill se producen cuando el Departamento de Seguridad Nacional está trabajando en una nueva lista de artículos que quiere ver en un acuerdo de inmigración, de acuerdo con varias fuentes familiarizadas con las discusiones en el Congreso y la administración.
La senadora Claire McCaskill de Missouri, que fue una de los pocos demócratas del estado rojo que se reunieron con la secretaria Kirstjen Nielsen el martes, dijo que había dicho a Nielsen claramente que sin una promesa del presidente Donald Trump, era imposible negociar sobre inmigración con su.
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"Hay cosas de las que ella quería hablar en términos de las prioridades del departamento de seguridad fronteriza mientras trabajamos en una factura, y yo dije, 'Escucha: Aquí está la cosa. No puedo comprometerme con nada hasta que me digas que tienes el apoyo del presidente ", dijo McCaskill. "Porque, ya sabes, creo que alguien hizo la analogía de Lucy y el fútbol. Tenemos que saber si vamos a comprometernos, tenemos que saber que el compromiso de hecho tendrá el apoyo del Presidente. "
McCaskill dijo a los periodistas que Nielsen no se comprometió a que ella hablara por el presidente, pero tampoco dijo que no podía hacerlo.
"Ella no dijo que no podía", dijo McCaskill. "Ella dijo: 'Entiendo lo que estás diciendo'. "
Además de McCaskill, Nielsen se reunió el martes con los senadores Jon Tester, D-Montana, Heidi Heitkamp, D-Dakota del Norte, Lamar Alexander, R-Tennessee y Chuck Grassley, R-Iowa, según un funcionario.
DHS está trabajando en un documento que se le dio a algunos negociadores en diciembre y se desmayó en la sala cuando dos docenas de legisladores se reunieron con Trump sobre el tema en una reunión parcialmente televisada a principios de este mes, según dos altos funcionarios del gobierno. Sin embargo, después de que las cámaras salieran de esa reunión, el presidente le dijo a los legisladores que no había firmado el documento y les ordenó que lo ignoraran, dijo a la prensa el senador Lindsey Graham, republicano por Carolina del Sur.
McCaskill no estaba solo en su frustración con la equivocación del presidente. Cuando se le preguntó el martes sobre el hecho de que el secretario de prensa de la Casa Blanca criticara públicamente una propuesta bipartidista que él había reunido, Graham contestó.
"Una cosa que le diría a la Casa Blanca: será mejor que comiences a decirnos para qué eres, en lugar de contra qué estás en contra", dijo el senador de Carolina del Sur. "Para mis amigos de la Casa Blanca, ha sido un compañero general, no ha sido un socio confiable y el Senado se va a mover".
DHS trabajando en una nueva guía
Basado en conversaciones múltiples con miembros del Congreso y sus comentarios y preguntas sobre varias piezas de las propuestas, un funcionario de la administración dijo a abogados de extranjería en Barcelona que la esperanza con la nueva guía escrita es aclarar aún más lo que el DHS considera necesario en un trato y por qué. El documento se enfoca en las cuatro áreas que el Presidente expuso públicamente en esa reunión: una solución sobre la política de Acción Diferida para Arribo Infantil, seguridad fronteriza, reducción de la migración familiar y finalización de la lotería de visa de diversidad.
Dentro de la categoría de seguridad fronteriza, Nielsen ha hablado públicamente sobre el deseo de algo más que infraestructura y recursos en la frontera, y que la agencia está llevando a cabo revisiones legales para la aplicación de leyes migratorias que le darían mayor poder para expulsar a los inmigrantes indocumentados del país. Aumentar la autoridad de aplicación ha sido difícil de vender entre los demócratas.
DHS también está buscando agregar más profundidad sobre lo que la administración quiere reemplazar DACA, que protegió a los jóvenes inmigrantes indocumentados que llegaron a los Estados Unidos cuando eran niños pero que la administración está por terminar. El funcionario dijo que sería la "próxima gran cosa" para que la administración trabaje.
El funcionario también señaló que DHS era "la única gente que le había puesto papel al lápiz hasta el momento" y se complació en aclarar más, pero no estaba interesado en "negociar contra nosotros mismos".
Y el funcionario reconoció el deseo de los legisladores de una mayor claridad, especialmente del Presidente.
"Entendemos que algunos de estos miembros van a tener que salir y queremos darles un proyecto de ley que puedan respaldar y que no les corten las piernas", dijo el funcionario. "Entendemos eso. Estamos trabajando para llegar allí".
McCaskill argumentó, sin embargo, que Trump ha puesto a Nielsen en una situación difícil.
