Antonio Machado (Sevilla, 1875 – Colliure, Francia, 1939) es una de las figuras más emblemáticas de la literatura española del siglo XX. Poeta esencial de la Generación del 98, su obra refleja una profunda introspección y un compromiso con la realidad social y política de su tiempo.
Desde sus primeros poemarios, como Soledades (1903) y su versión ampliada Soledades, galerías y otros poemas (1907), Machado exploró temas como la soledad, el paso del tiempo y la búsqueda del yo interior, utilizando un lenguaje simbólico y melancólico.
Su estancia en Soria marcó un punto de inflexión en su obra. Allí escribió Campos de Castilla (1912), donde volcó su mirada hacia el paisaje castellano y sus gentes, convirtiéndose en un testimonio lírico de la España rural y sus desafíos.
A lo largo de su vida, Machado también incursionó en el teatro, colaborando con su hermano Manuel en obras como La Lola se va a los puertos (1929) y La duquesa de Benamejí (1932), que combinan elementos de la tradición española con una crítica social sutil.
Durante la Guerra Civil Española, Machado se mantuvo fiel a la República y escribió numerosos artículos y poesías que reflejaban su compromiso con la causa republicana. Su exilio en Francia culminó con su fallecimiento en Colliure en 1939. En su abrigo se encontró un papel con su último verso: "Estos días azules y este sol de la infancia".
El legado de Antonio Machado perdura como un testimonio de la riqueza emocional y estética del Romanticismo español y de su profundo amor por la tierra y el pueblo de España.